El regreso del ATOS
Este fin de semana el super ATOS regresó de su ausencia de mas de un mes, mes en el que tuve que usar el transporte colectivo de la empresa en lo que por si eran peras o eran manzanas decidí cargar en mi cartera solo aquellas cosas que realmente fuera a necesitar y así transurrió ese mes, sin pena ni gloria hasta el sábado donde me invitó Emmanuel a El Paso y decidimos ir en el reestrenado ATOS, ya en la línea (palabra juarence para hacer referencia a fila) del puente libre, mientras transcurría la espera, salió a la plática el seguro del auto en los states, donde sarcásticamente comenté que ni siquiera traía la tarjeta de circulación y ningún documento del auto, cuando como en las películas viene a mi mente una sucesión de imágenes de esas que te dejan paralizado: primero la casa, luego las escaleras, luego la cajonera en el cuarto y al final la VISA en uno de los cajones. Mas de una ocasión hicimos chistes de que si a alguien se le olvidaba la visa ya estando en el puente pues que se regresara caminando, pero esta vez si era de verdad, que iba a hacer? no me podía salir de la fila, iba a ser sospechosa mi situación? pensarían que tal vez llevaba una bomba? pues al fin después de preguntarle a un oficial de esos que andan paseando entre los autos de la fila y que me dijera que me mantuviera sobre la línea de la orilla y que al final le contara al oficial en la caseta la situación, este me abriría una puerta para poder ir de regreso y así fue, aunque pareció que este último se molestó un poquito no pasó nada mas, je, ya traigo nuevamente de planta la visa en la cartera. En otro orden de ideas, ya solo faltan 40 días para la boda y ya siento nervios, pero no es por miedo a el cambio de estado civil o algo similar, si no porque aun me falta por pagar algunas cosas, ojalá pasen pronto los días para quitarme este estrés.